Por Mireya Cárdenas
De no concretarse la recién anunciada asignación “histórica” de 7,500 millones más para el Programa de Desarrollo Comunitario; “Tu Hogar Renace” aún es considerado por la prensa como uno de los programas de construcción más grandes en términos de asignación monetaria que ha visto el territorio. El programa comenzó gracias a una asignación de 1,500 millones de dólares a ser utilizados para su implementación junto a la de otro programa de “Asistencia Individual”. La contratación para “Tu Hogar Renace” se da en virtud de la autorización de FEMA bajo la sección 403 del Stafford Act para implementar el programa llamado “Sheltering and Temporary Essential Power” (STEP) que faculta al Departamento de la Vivienda a proveer reparaciones menores de emergencia en viviendas individuales para hacerlas “habitables” a corto plazo. Esto es, para que la gente pueda permanecer en sus casas y así se pueda “atender” el inminente problema de acceso la vivienda, agudizado por el Huracán. Sabemos, sin embargo, que si monumental es la asignación monetaria, monumental es y será el robo a la clase obrera al implementarse este y otros programas de “recuperación”.
“Tu Hogar Renace” busca aprobar, inspeccionar y efectuar reparaciones “temporales de emergencia” durante seis meses en 75,000 viviendas afectadas por el Huracán María. Las reparaciones — que podrán ser de hasta 21,000.00 dólares por unidad de vivienda — incluyen reparaciones de sistema eléctrico, techos, paredes, puertas, ventanas, calentador de agua, generador con dos contenedores de gasolina, cuatro extensiones, cisterna, nevera pequeña, estufa pequeña, entre otros. Dada la gran cantidad de solicitudes, el límite para solicitar se ha extendido hasta finales del mes en curso.
Comprobado el abuso y malversación masiva de estos fondos, las severas críticas al proyecto no se han hecho esperar dado el evidente despilfarro, malgasto y fraude del que han sido testigo las familias participantes del programa. Sin embargo, las denuncias del pueblo no han sido impedimento para que las dos corporaciones que se disputan la administración del contrato (Adjusters International Corp y AECOM) aún estén en los tribunales. Mientras la riña judicial entre estas dos compañías capitalistas continua, la clase obrera y las masas populares en Puerto Rico sólo sufren carencias y reciben las peores migajas posibles. A los hogares llegan enseres y materiales de muy baja calidad y hasta de procedencia donada. Estos luego son facturados por los contratistas como si fueran de primera calidad. También se ha facturado como “tratamientos” y “reparaciones” todo tipo de engaño. Sólo por dar un ejemplo, hemos recibido testimonios de que los contratistas facturan cantidades sustanciales por la aplicación de tratamientos supuestamente “anti-hongo” en los hogares afectados. En realidad, el tratamiento consiste en pasar rápidamente un paño con limpiador de ventanas “Windex” por las áreas húmedas de la casa.
En fin, se trata de la aplicación del mismo modelo de “ayuda” que conocemos todos y no nos es ajeno: una vez más, todo para los capitalistas, y nada para la clase trabajadora. Las viviendas no han quedado en mejor condición que antes y con peores reparaciones, miles de dólares de facturación a cada hogar después. De hecho, ha trascendido en la prensa territorial que la falta de personal debidamente capacitado para inspeccionar y reparar los hogares son la orden del día.
Adjusters International fue la corporación agraciada en diciembre de 2017 con la buena pro y un contrato de 132 millones de dólares para ser la administradora de los fondos del programa y dirigir la subcontratación. No obstante, el sombrío historial y credenciales de esta compañía– la cual se cambió de nombre a Rising Phoenix Holdings, Corp. justo antes de comenzar sus operaciones el 1 de enero para desviar la atención pública– provocó que la Junta Revisora de Subastas del Departamento de la Vivienda procediera a decretar la cancelación del contrato por las deficiencias de su propuesta. La cancelación, sin embargo, no es aún final y firme, lo que significa que persiste la pugna judicial entre ésta y AECOM.
El actual vicepresidente de Adjusters International, Daniel Craig, fue nominado por Trump para ser el segundo en mando de FEMA, pero luego tuvo que retirar la nominación por estar envuelto en un escándalo de falsificación de documentos en FEMA mientras fungía como director de la división de recuperación de dicha agencia durante el Huracán Katrina bajo la administración de J.W. Bush en el 2005. Bajo su mando Adjusters también realizó trabajos de reconstrucción en Kuwait tras la Guerra del Golfo Pérsico; y así como otros trabajos de reconstrucción para la Autoridad de Puertos de Nueva York y Nueva Jersey tras los atentados del 11 de septiembre de 2001.
La victoria de Adjusters, sin embargo, está aún en entredicho. AECOM — una de las firmas de ingeniería y arquitectura más grandes y poderosas a nivel global –está buscando que se notifique lo antes posible la cancelación para que el Tribunal pase juicio sobre ella en los méritos. El Tribunal de Apelaciones determinó que la revisión de la cancelación era prematura porque la notificación de la cancelación hecha por la Junta era una deficiente, por lo que ordenó la devolución del caso nuevamente a la Junta de Subastas para que notificara nuevamente la cancelación, sin entrar en los méritos de ésta. No obstante, a la fecha de hoy el Tribunal ha ignorado el pedidos de AECOM para que emita lo antes posible el mandato a la Junta para que ésta notifique de nuevo la cancelación. Esta dilación del Tribunal, ya en exceso de los días días que tiene por Reglamento para emitir el mandato a la agencia, claramente aventaja a Adjusters, puesto que aunque su contrato está técnicamente cancelado, todavía sigue operando.
La prensa territorial ha demostrado su preferencia por Adjusters, advirtiendo del daño humanitario que provocaría la interrupción del programa por la cancelación del controvertido contrato. Adjusters ha ganado tiempo y seguirá fungiendo como ente administrador, mientras que la contrincante AECOM ha demostrado su intención de defender la cancelación. Toda esta riña deja clara la sed descomunal de ganancias que tienen estas dos compañías y la avidez por acaparar los fondos millonarios que supone este programa de “recuperación”.
Según Adjusters en su recurso judicial, AECOM no podrá desbancarlo, puesto que es un “sore looser” y tiene al frente de sus intereses como asesor del patio al Lic. Elías Sánchez. Sánchez, el embustero y corrupto representante de Wall Street y siervo de los parásitos financieros en el territorio. Según expresó Adjusters al Tribunal, Sánchez trabaja para AECOM y se dedicó a ejercer presiones indebidas con la administración de turno de la cual es miembro, para ganar indebida ventaja sobre la compañía del igualmente sátrapa y corrupto Sr. Craig.
La casi-ganadora AECOM, por su parte, no dejó de criticar a Adjusters por mentir en su propuesta y así evitar ser descalificado. Según alegó, la recién incorporada “Rising Phoenix Corp.” no cuenta con el requisito mínimo de una línea de crédito o cuentas bancarias con al menos 35 millones, ya que en realidad sólo cuenta con una línea de 16 millones. También reprochó a Adjusters no estar autorizada a hacer negocios en Puerto Rico ni estar registrada como ente licitador ante la Administración de Servicios Generales.
La oferta económica final de Adjusters fue de $132,849,389.42, mientras que la de AECOM fue de aproximadamente 21 millones de dólares más (la oferta final de AECOM fue de $154,195,116.00). Es claro que tratándose de tanto dinero, estas compañías depredadoras defiendan con uñas y dientes su interés en obtener una buena tajada de los fondos millonarios a costa del desastre que sufren las familias trabajadoras en Puerto Rico.
Adjusters sostuvo en defensa de su dudoso contrato que desde que se le otorgó el mismo el pasado 5 de enero, durante el primer mes de operaciones atendió 78 mil llamadas, 48 mil solicitudes, y la inspección de sobre 6,500 hogares. Indicó además, que para febrero que ya tenían 5,500 hogares con contratista asignado y 75 hogares totalmente reparados. Sostiene que ha subcontratado a ocho compañías de contratistas, siendo entre las primeras contratadas la empresa de mercadeo, LinkActiv, propiedad del grupo Ferré Rangel. Es claro entonces que las capas más poderosas de la burguesía criolla, en este caso, el Grupo Ferré Rangel –cuya agenda es confundir y manipular de la peor forma a la clase trabajadora en los medios masivos de comunicación del territorio — son las primeras invitadas a formar parte del guiso y del robo sostenido de los fondos administrados por los corruptos de Adjusters. Se pintan como benévolos, indicando que han generado de 300 a 500 empleos “indirectos” — es decir, empleos precarios– en las primeras semanas del programa. Sin embargo, todos estos números y “logros” del programa, considerada la meta de 75,000 hogares reparados en seis meses para una inversión total de 350 millones, son sencillamente un intento risible de relaciones públicas para lavarse la cara. Esto resultará obvio para todo trabajador consciente que examine estos números.
No nos cabe duda que el robo camuflado de “ayuda” y “recuperación” es la expresión concreta y material de éste y demás programas de “desarrollo” bajo la dictadura del capital, instrumentados por la burguesía y sus representantes políticos del patio, la pandilla de Ricky y sus cómplices de turno. Solo un partido comunista organizado de forma independiente por y para la clase obrera dirigido a la toma del poder pondrá término final al engaño y la explotación al que estamos sujetos por parte de los capitalistas. ¡Ningún hogar obrero recuperará materialmente y de forma digna mientras existan empresas capitalistas devorando y usurpando las riquezas que las obreras y obreros creamos con nuestro trabajo! ¡Todo para la clase obrera! ¡Nada para los capitalistas! ¡Por un Puerto Rico para la clase trabajadora!