Comunicado de Prensa
8 de marzo de 2017
San Juan, Puerto Rico
El Partido Comunista de Puerto Rico envía un fraternal y revolucionario abrazo a todas las mujeres trabajadoras en el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Las obreras en Puerto Rico representan un componente fundamental de la clase obrera, más aun cuando son uno de los sectores más afectados por las medidas de miseria hacia las masas trabajadoras. Es por esto que la manera más consecuente de luchar por los derechos de la mujer es integrándose a la lucha en resistencia a los atropellos hacia la clase trabajadora.
Con todo un despliegue de subterfugios la administración del territorio ha profundizado las medidas exigidas por los buitres financieros. Las medidas establecidas y las próximas a aprobar, verborreas como medidas en beneficio a los ciudadanos, representan ataques directos contra los trabajadores. Los lacayos colonialistas intentan ocultar sin éxito su obediencia a la Junta de Wall Street. La verdad es que juntos encaminan al territorio hacia el “desarrollo económico” de los millonarios. El plan fiscal es la más reciente muestra de que los administradores coloniales, aun con todo su perfume de populachos, están a favor de los recortes al bienestar social.
Nos conducen ciertamente a un “crecimiento económico” que exigen los capitalistas. Su supuesto crecimiento es mediante más recortes de empleo, una reforma contributiva que exprime la vida de las masas obreras pero reduce los tributos a los grandes negocios, una reforma laboral que reafirma la esclavitud asalariada, una vida de miseria para nuestros jubilados y la re-estructuración del gobierno eliminado servicios sociales (como la salud y la educación) para fortalecer las estructuras represivas, entre otras medidas.
Los obreros no deben confundirse con medidas como la reciente orden ejecutiva de aumento de sueldo mínimo a $8.25 la hora en el sector público. ¡Más del 90% de ellos ya gana esa cantidad o más! Son movidas baratas con el propósito de dividir a la clase obrera y a su vez un intento de ganar su confianza ante todas las medidas anti-obreras bajo el fuego. Los trabajadores no deben colaborar ni un ápice con el gobierno del territorio.
Los trabajadores consientes exigimos algo completamente diferente para desarrollar el país. Exigimos un programa masivo de creación de empleos sin reducciones del salario. Exigimos un ajuste racional de la jornada de trabajo que garantice el empleo además de una comisión estadística compuesta por obreros que determine los salarios según el costo de la vida, incluyendo las necesidades básicas como la alimentación, atención médica adecuada, vivienda, etc. además de un desarrollo cultural. Exigimos un sistema estatal de atención médica universal y beneficios de retiro garantizados. Exigimos la abolición de todos los impuestos al consumo y el establecimiento de un sistema de contribuciones sobre las ganancias de capital. Las masas obreras exigen un plan racional de desarrollo sostenible que reparta la riqueza social equitativamente entre las mayorías que la producen.
Tales reivindicaciones no las ofrecerán los capitalistas, sino que requieren la toma de conciencia de las masas y la lucha activa por la toma del poder político. Las acciones de presión hacia los políticos coloniales representan sin duda expresiones genuinas de coraje y combate. Aun así, quedarán obsoletas sino se logran combinar con una reorganización de la resistencia popular orientada hacia la clase obrera y guiada por un programa socialista. La única forma de lograr sentar las bases para este horizonte es mediante la creación de nuevos órganos de poder popular donde los obreros participen directamente de la política pública del país.
¡El desarrollo económico capitalista no sirve! ¡Organicemos consejos obreros!
Comisión Política
Partido Comunista de Puerto Rico