Por Carlos Borrero
En los últimos días se ha desatada en los medios estadounidenses una serie de anuncios auspiciados por el Center for Individual Freedom (Centro para la libertad individual) sobre la deuda pública en Puerto Rico.[1] En el más reciente de los anuncios aparece Teresa García, una señora jubilada que se identifica como ‘bonista’ y que se expresa en contra del llamado super capítulo 9 para Puerto Rico. Su oposición a la reestructuración de la deuda mediante el capítulo 9 se base en la idea de que como un «ahorradora» tal medida haría que sus ahorros sean «aniquilados».
El Centro para la libertad individual es una organización totalmente reaccionaria con vínculos a personas como Karl Rove, uno de los principales asesores del ex presidente Bush,[2] cuya defensa del capital no conoce límites. Es una organización dedicada a recaudar el llamado dinero oscuro lo cual se refiere a los fondos recaudados por los capitalistas que desean permanecer en el anonimato para los efectos de la influencia ideológica – o como ellos cínicamente llaman la educación – así como la determinación de la legislación mediante esfuerzos de cabildeo. Su campaña mediática está llena de una serie de distorsiones con la notable excepción de una verdad profunda que ha traído inadvertidamente al primer plano.
Lo que expresa doña Teresa subraya un problema serio que agobia al movimiento obrero tanto en Puerto Rico como en el mundo entero. La lucha histórica de la clase obrera por obtener un retiro garantizado representa un logro importante. Sin embargo, esta reforma, como todas, se logró dentro de condiciones favorables para el capital y como tal resultó en un fortalecimiento de la posición capitalista. En otra ocasión[3] explicamos que los salarios diferidos que componen los actual fondos de retiro, tanto los públicos como los privados, terminan siempre apropiados por el capital financiero a través de sus administradores de fondos. Una vez apropiados, estos salarios diferidos en la forma de fondos colectivos se invierten en instrumentos financieros tales como bonos, acciones, etc. Esto representa no sólo una enorme cantidad de riqueza que se pone a la disposición del capital financiero sino también uno de los principales medios a través del cual se integra la clase obrera en la defensa ideológica del sistema capitalista. Aunque los comentarios de Teresa pretendían contrarrestar el llamado de los liberales para una reestructuración de la deuda de Puerto Rico, lo que realmente revelan es la manera nefasta en la que los trabajadores han perdido el control sobre una parte significativa de sus salarios, así como la forma en que los capitalistas ejercen un grado enorme de influencia ideológica sobre la clase obrera.
La clase obrera no puede simplemente luchar para defender el actual sistema de retiro o para una reestructuración de la deuda pública en Puerto Rico. Estas reformas en sí no llegan a la raíz del problema y como hemos visto son aún bajo las mejores circunstancias fácilmente manipuladas por los capitalistas para servir a sus propios intereses. Por el contrario, la clase obrera debe luchar por el poder político con el objetivo de ponerle fin a la propiedad capitalista y llevar a cabo un programa socialista revolucionario. Si bien esta lucha puede comenzar con una campaña para poner bajo el control directo de los trabajadores todos los fondos de retiro debe incluir en última instancia la creación de un sistema público de retiro garantizado a escala nacional y controlado por la clase obrera. De la misma manera, la clase obrera no debe dejarse llevar por el engaño liberal que reclama una reestructuración de la actual deuda. Los obreros conscientes entienden que la deuda pública representa el elemento vital para los parásitos financieros y como tal exigen la anulación unilateral de la misma.

En oposición a la cínica campaña desatada en los medios por los representantes del capital, los obreros conscientes en Puerto Rico hacen su propio llamado a sus hermanos proletarios en EEUU y en todo el mundo. Los obreros conscientes en Puerto Rico se solidarizan con los trabajadores estadounidenses, particularmente los de Verizon, quienes luchan contra los intentos de la clase capitalista para reducir sus salarios y despojarlos de conquistas históricas tales como el derecho a retirarse con dignidad. Los obreros conscientes en Puerto Rico vemos la lucha de estos hermanos como suya e instamos a todos los obreros estadounidenses a unirse a sus denuncias de la campaña cínica y manipuladora que están llevando a cabo los representantes de los parásitos financieros. De la misma manera llamamos a todos los obreros del mundo a oponerse al intento de usar la deuda pública como pretexto para llevar a cabo la ofensiva más brutal contra la clase obrera internacional.
Que tiemblen los capitalistas y sus secuaces ante nuestro grito, ¡Proletarios del mundo, uníos!
¡Consejos obreros en Puerto Rico y más allá!
[1] https://www.youtube.com/watch?v=TBA-msVRXgw
https://www.youtube.com/watch?v=fw4UTeD0zMg
[2] http://www.motherjones.com/politics/2012/04/karl-rove-crossroads-gps-center-individual-freedom
[3] Quiebras municipales, pensiones y nuevas dimensiones de la lucha de clases AbayardeRojo Digital, 8 de agosto 2013
Tremendo análisis, aunque entiendo que pensar que la única solución es la toma del poder por la clase obrera es descartar cualquier alternativa a corto y mediano plazo para una clase trabajadora con un nivel de conciencia muy bajo. Si le planteamos a la clase trabajadora que esa es la única solución, no veo cómo eso engrose las filas de la corriente revolucionaria sino que los desilusione y los haga sucumbir ante el modelo actual. Podríamos explorar la creación de un modelo alterno basado en el cooperativismo como una opción inmediata que pone bajo control democratico de los trabajadores la administración de sus propios fondos de retiro. Aunque eso no es una solución total, siendo el cooperativismo un sistema dentro del esquema capitalista, si entiendo que propiciaría cierta confrontación con el orden actual de las cosas y una oportunidad buenisima para lograr un adelanto cualitativo en la disposición de lucha de las masas trabajadoras. L@s comunistas debemos asumir la política de la cotidianidad como una herramienta para desarrollar y fortalecer la conciencia de clase de l@s trabajador@s. Para alguien con poca conciencia de clase, el tomar el poder es una solución muy lejana e invisualizable.
Camarada Frederick, intentaré responder a tu comentario a dos niveles. Primero, en términos generales, los comunistas reconocemos el valor de la lucha por las reformas (la cotidiana) ya que sin ellas los capitalistas aplastarían a los obreros. Las reformas se hacen necesarias para los obreros recobrar fuerzas en las sucesivas fases de auge y repliegue que caracterizan la lucha de clases. Aún así, no nos limitamos a ellas ya que, como he tratado de demostrar, dejan siempre intacto al sistema de explotación. Precisamente por eso planteé arriba que «Si bien esta lucha puede comenzar con una campaña para poner bajo el control directo de los trabajadores todos los fondos de retiro» en última instancia debe ir más lejos. Como comunistas, tenemos la obligación moral de decirles a los obreros esta verdad y no adorar la píldora ni mucho menos ocultársela. Sólo de esta manera sentamos las bases para la eventual toma de conciencia y poder.
Pero aún al nivel de la propuesta que planteas podemos ver cómo un proyecto cooperativista, que como bien señalas se mantiene dentro del esquema capitalista, se vuelve en algo beneficioso para la clase capitalista. Me explico. Una cooperativa, que no es nada más que una forma de la pequeña propiedad, siempre tiene que lidiar con el problema de escala. Para que un fondo de retiro dé lo suficiente y dure, o tiene que expandirse las operaciones de la cooperativa misma o el fondo tiene que invertir en instrumentos financieros ‘rentables’. En los dos casos se ve claramente la adhesión de los obreros a la supervivencia del sistema capitalista. Si tomamos el caso de la cooperativa más grande y exitosa a nivel internacional que es la empresa vasca Mondragón, podemos ver el cambio cualitativo que se da una vez una cooperativa llega a una escala suficiente para que su sistema de retiro pueda considerarse ‘sostenible’ en el tiempo. Aprovechando ciertas condiciones favorables tanto en el mercado español como el mundial, creció hasta convertirse en una verdadera ‘multinacional’. Sin embargo, hoy día podemos ver la misma conducta de parte de su junta de directores como la de cualquier otra empresa capitalista en respuesta a la depresión económica y la intensificada competencia que ésta trae (ej. despidos en masa, empeoramiento de condiciones laborales, reducción de beneficios, etc.) Esta cooperativa, que es la más exitosa del mundo, demuestra muy claramente el punto que siempre hemos planteado sobre los límites de tales reformas.
Finalmente, coincido contigo que para las personas con muy poca conciencia de clase o revolucionaria la idea de la toma de poder es muy lejana. Pero la clase obrera no es ideológicamente homogénea y la tradición comunista en Puerto Rico no es muy profunda. Hay trabajo que hacer. Mientras se empeoran las condiciones materiales de la gente, habrá más oportunidades para que nuestro mensaje les llegue. Creo que es imperdonable para un comunista claudicar ante la tormenta que nos viene encima.