Partido Comunista de Puerto Rico
14 de diciembre de 2015
San Juan, Puerto Rico
Comunicado de prensa
Con la propuesta legislación del Congreso estadounidense hecha pública el miércoles pasado queda desenmascarada la verdadera esencia de la democracia burguesa. Lo que existe en realidad es la dictadura del capital. El intento de representar la propuesta legislación, que incluye imponer sobre la colonia una sindicatura dictatorial en la forma de una nueva agencia federal, como una postura única de la ‘extrema derecha’ republicana es puro teatro político. Toda la clase dominante y sus representantes políticos, tanto en EEUU como Puerto Rico, están unidos en esta ofensiva contra las masas obreras. Los demócratas, inclusos los boricuas entre ellos, que quieren hacerse pasar como defensores de los intereses de las masas puertorriqueñas mediante sus propuestas para incluir a la colonia bajo la llamada protección del Capítulo 9, la ley de quiebra, no se oponen en lo más mínimo a la brutal explotación a que están sometidos los obreros en la colonia. Sólo buscan organizar el pillaje que se está llevando a cabo. De la misma manera, la supuesta indignación de los líderes populares emana no del supuesto sentimiento de una ‘afrenta a la autonomía local’, sino del hecho concreto de que ahora los secuaces coloniales no podrán ‘guisarse’ solos los chavitos del presupuesto colonial.
En su composición, la nueva agencia representaría el abandono de toda pretensión democrática la cual la clase capitalista considera cada vez más un obstáculo para la consecución de sus intereses. La inclusión en el proyecto de ley de administradores de emergencias para hacerse cargo de las empresas públicas constituye el último paso en un plan amplio para abrir aún más las vías de pillaje a los parásitos financieros. Este plan incluirá la eliminación de los últimos vestigios de casi un siglo de conquistas históricas de la clase obrera como son las pensiones garantizadas además de otra serie de protecciones laborales. La legislación no hará nada para aliviar la carga de la deuda pública – una de las clausulas contenidas en el proyecto de ley le otorga a la nueva agencia federal la potestad para emitir nuevas deudas – sino que garantizará que todos los nuevos préstamos del gobierno colonial se contraigan bajo el marco legal férreo elaborado directamente por los representantes del capital financiero.
Lo que es de importancia crítica para los obreros avanzados en Puerto Rico es no limitarse a un repudio de la propuesta legislación del Congreso u organizar una oposición a la imposición de una junta dictatorial. Estas son acciones imprescindibles. Sin embargo, también es necesario denunciar vigorosamente a todas aquellas fuerzas del oportunismo dentro de la llamada izquierda puertorriqueña que han allanado el camino para esta brutal ofensiva de la clase dominante. Son cómplices en esta ofensiva capitalista todos aquellos que desvíen a los obreros de un camino revolucionario para resolver la apremiante crisis social que ha generado el capitalismo en Puerto Rico.
¿En qué consiste esta complicidad? Consiste en los intentos de convencer a los obreros puertorriqueños a circunscribir su oposición a las medidas llevadas a cabo por los representantes políticos de la clase capitalista al marco electoral dentro de la colonia. Consiste en los intentos de convencer a los obreros puertorriqueños a buscar ‘soluciones’ que conserven los derechos de la propiedad privada capitalista. Consiste en toda prédica de ‘paz social’ entre clases antagónicas, o cualquier otro discurso que debilite la voluntad de lucha de los obreros y obreras puertorriqueñas, particularmente cuando son el blanco de ataques tan descarados.
La historia le ha impuesto sobre la clase obrera puertorriqueña enormes cargas. Sin embargo, también ha ofrecido a los obreros y obreras boricuas la oportunidad de asimilar muchísimas lecciones de las experiencias de la clase obrera internacional. Entre las lecciones más importantes que tendrá que asimilar la clase obrera en la actualidad es la necesidad de organizarse independientemente de las clases dominantes y luchar para la toma del poder político y poner bajo el control obrero los principales medios de producción.
¡No a la sindicatura dictatorial e imperialista, anulación unilateral de la deuda!
¡No al oportunismo de la burguesía puertorriqueña!
¡Consejos obreros y Asambleas Populares ahora!
Comisión Política PCPR