Por: M.A.O
En esta entrevista a un miembro de la UTIER se refleja generalmente como los administradores coloniales abren las aperturas para que los parásitos del capital financiero se apropien de las riquezas de la clase productora.
AR: La Autoridad de energía eléctrica (AEE) es una de las agencias cuyo endeudamiento ante el capital financiero dirigido por bonistas locales y trasnacionales ha emprendido una devastadora lucha contra los/as trabajadores/as de la AEE. ¿Cómo podrías detallarnos los efectos que esto ha tenido en las condiciones laborales de los trabajadores de la AEE y como ha afectado el servicio eléctrico a la sociedad puertorriqueña?
Sindicalista: En primer lugar el enfoque ha sido complacer a los bonistas. Mientras el pueblo ha sido el gran perjudicado. Las diferentes administraciones solo han velado por cuadrar sus negocios y no los más favorable para la AEE y el país. Pues estos inversionistas utilizando como trampolín las casas acreditadoras han forzado el aumento en las emisiones de bonos, con vencimientos acelerados a la fechas pautadas al ser «degradados», creando un laberinto sin salida, más que la destrucción de los bienes del pueblo. Van afectando los ingresos y derechos laborales, repercutiendo así en la economía. Esto es un laberinto sin salida y si no se atreven a brincar por encima de los muros de éste, seremos victimas de su trampa.
AR: Todo el aparato especulativo que se ha construido en el modelo económico capitalista colonial del país, representa unos renglones específicos que liberan unos procesos encaminados a salvar el capital en la economía global. Tales procesos nos conducen a pagar la deuda por varias vías: privatización; reducción de derechos laborales; impuestos a la clase trabajadora, etc. Todos bien presentes en la colonia capitalista. En ese sentido ¿a qué sector social están respondiendo los administradores coloniales de turno?
Sindicalista: Pues este gobierno actual que llegó al poder prometiendo «Primero la Gente», protege muy bien a su gente, a los inversionistas y controladores del gran capital. Están actuando según los guían por el laberinto del “fiao” y el aumento en la deuda con intereses IMPAGABLES. Tenemos un gobernador inconsciente, que le importa poco el bienestar del pueblo que juró defender.
AR: Las/los trabajadoras/es comenzaran a sentir el desplome del sistema colonial. Pero vemos que no hay una dirección clasista en las organizaciones sindicales y de masas en el país. ¿Díganos algo sobre esta situación histórica que se les presenta a los trabajadores para impulsar cambios cualitativos qué pongan en jaque las intenciones del capital en desvalorizar nuestra fuerza de trabajo para acumular mayores tasas de riquezas?
Sindicalista: La realidad es que la UTIER siempre ha comunicado a su matrícula todas estas amenazas que constantemente han estado al asecho de Puerto Rico y la AEE, pero el pueblo está comprobando como estos principales partidos políticos que han gobernado han sido un engaño tras engaño, y que solo llegan al poder a repartirse los recursos del país sin importar las consecuencias.
AR: En estos días la UTIER junto a otros grupos sindicales instalaron un campamento en el capitolio como forma de resistir la implementación del Impuesto al valor añadido (IVA). Como bien usted sabe, todos los aparatos del estado (medios de comunicación; proyectos de ley como la del “sabotaje al servicio público”; políticos bonistas que están detrás de meter chavos en la AEE; etc.) concentran una campaña de odio a los sindicatos, en especial a la UTIER. En la medida en que vaya tomando mayor forma el desplome del sistema colonial, esto se agudizara. Entonces, ¿hacia dónde se dirige la organización obrera UTIER en este panorama, cuya importancia es crucial para la clase obrera, ya que se considera la más consciente y con un historial lleno de lucha?
Sindicalista: La estrategia de la UTIER ante este panorama es resistir, mantener su matrícula informada semanalmente en reuniones en los centros de trabajo, programa radial, boletines, asambleas regionales, etc. En cuanto a la campaña de odio aunque quedan rastros, ha mermado, pues nuestros pronósticos de como vienen a destruir una de las agencias que dentro de las limitaciones y mala administración que ha sufrido, continúa dando un buen servicio. En días pasados un compañero me trajo a mi atención la siguiente comparación; el seguro obligatorio de auto privado en PR paga 98 dólares y cubre hasta $4,000 dólares máximo, ACAA paga 35 dólares en tu marbete y cubre ilimitado en gastos y tratamiento médico. Así mismo pasará con la AEE, cuando el servicio en lugares rurales salga costoso repararlo, pasará lo mismo que pasa actualmente con Claro, no lo reparan y te quedas sin servicio. Esa es la gran diferencia entre lo público y lo privado. Ya las personas están muy conscientes de esto, no solo por decirlo sino porque lo viven diariamente. Solo falta continuar con la campaña informativa de que vamos hacer para evitarlo y luchar. Esto es lo que hay que reforzar, no solo lo que está mal, también como lo vamos a combatir.