Partido Comunista de Puerto Rico
24 de febrero de 2015
San Juan, Puerto Rico
Comunicado de Prensa
El Partido Comunista de Puerto Rico condena la pretensión de los diferentes sectores de poder del país a colocar nuevamente el peso de la deuda, por medio de la imposición de un nuevo tributo al consumo en la forma de Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), sobre los hombros de la clase trabajadora. Con su llamada “reforma contributiva” la burguesía criolla y sus marionetas de turno, pretenden esconder con el discurso oportunista y trillado de “atacar la evasión”, la verdadera naturaleza de esta abusiva imposición: el pago de la deuda impagable y la próxima salida al mercado de bonos.
Ante la urgente necesidad del gobierno colonial de acceso a fuentes de financiamiento para mantener, no tanto sus operaciones, sino más bien, para continuar con el pago de la deuda eximiendo al gran capital, sus representantes idearon la Reforma Contributiva. Sin embargo, aparte del pago de la deuda y el funcionamiento del gobierno colonial, la burguesía importadora y el capital financiero, legislaron esta Reforma para aumentar sus ganancias dentro de un contexto de depresión económica que promete agravarse con el IVA. Por tanto, con la reforma contributiva, aun aumentando el salario mínimo, nos obligarán a trabajar más horas para poder adquirir nuestros medios de vida.
Sin embargo, la imposición del IVA representa más que un ataque coyuntural contra la clase trabajadora. El capital financiero está impulsando una transformación radical en la concepción social de trabajo. Un cambio en cómo nuestra sociedad concibe moral, históricamente, lo que son las condiciones mínimas necesarias para nuestra supervivencia. Esa “transformación” está dirigida a que aprendamos a vivir con menos.
La prueba más certera de quiénes son nuestros enemigos de clase es el proyecto cameralPC 2329 “Ley de transformación al sistema contributivo del Estado Libre Asociado”. Este documento constituye un verdadero catálogo de los sectores económicos (y por tanto políticos) que estarán exentos del pago del IVA. Entre los sospechosos de siempre, se encuentran sectores de compraventa inmobiliaria, banca y transacciones financieras, importación de vehículos de motor, corporaciones foráneas bajo el esquema del código de rentas federal y el sector hotelero.
La desagradable campaña de medios que ha llevado la dirección del PPD, coordinada con las declaraciones diarias de los más destacados pistoleros del capital financiero, “Tatito” Hernández y el Secretario de Hacienda Juan Zaragoza, ha enfilado sus cañones hacia “la evasión.” Sin embargo, quieren hacernos creer que el problema de liquidez del gobierno colonial se debe a la evasión de personas asalariadas, así como pequeños comercios. Pero el verdadero problema reside en que la evasión contributiva a gran escala viene de los sectores con poder económico y político, como el capital financiero, el comercio multinacional y la burguesía importadora. El cinismo de quienes pretenden ponernos a pagar la deuda es tal, que mientras hablan de “evasión” son ellos quienes evaden y se han beneficiado de las famosas exenciones contributivas, es decir, son ellos quienes más le deben a la sociedad. Estos sectores de poder económico, en plena complicidad con las estructuras del gobierno colonial, solo en el periodo entre 2008 y 2014, le deben al erario público más de $2,600 millones.
Por los pasados años, para el funcionamiento del gobierno, es decir subvencionar al capital asentado en Puerto Rico, se presupuestan sobre $9,600 millones, cuando el ingreso neto del Fondo General ha sido de $8,500 millones (2013). Los guaynabitos del PPD que impulsan la Reforma, destinan más del 50% del presupuesto (sobre $4 mil millones al año) al pago de la deuda, a la vez quieren eximir a sus patronos del capital de asumir la responsabilidad de la crisis social que han provocado con su “modelo económico”.
No cabe duda que con estas nuevas medidas de austeridad impulsadas por la burguesía colonial, en contubernio con el capital financiero, se auguran tiempos difíciles y de aumento del nivel de pobreza del actual 45% de la población. Ante esta crítica situación social, política y económica de la colonia a la clase obrera solamente nos queda el camino de la organización clasista para poder enfrentar efectivamente la ofensiva del capital. Debemos organizarnos desde todos los ámbitos sociales posibles: sindical, comunitario, ambiental, de mujeres, todos orientados hacia la lucha contra la depredación capitalista y del empeoramiento de nuestras condiciones de vida. Solamente a través de la organización política independiente de la clase obrera y desde una perspectiva revolucionaria, podremos comenzar a fomentar y rescatar esos espacios de lucha que nos ha arrebatado el capital.
Solo por medio de la lucha organizada como clase, podremos arrancarle al capital espacios en los terrenos económico y político, para lograr mejoras en salarios, condiciones laborales y beneficios sociales. Todos los componentes de clase obrera, público y privado, debemos luchar por la justa distribución de la riqueza entre las mayorías que la producimos. La organización popular nos dará la fuerza, no solo para mejorar nuestras condiciones de vida, sino para destruir el capitalismo en Puerto Rico y comenzar la construcción de una sociedad superior: la socialista.
¡Ante la ofensiva del capital: conciencia y organización revolucionaria!
Comisión Política
PCPR