Al son de la demagogia, de las medias verdades, de la hipocresía y del fascismo colonial, se presento el pasado lunes, 12 de mayo 2014 en las grandes cadenas mediáticas del país (Wapa, Telemundo, Univisión) el programa ¿Por qué pagamos tanto? Pero ¿qué junte más extraño? ¿Por qué este Junte? ¿Quién está detrás de este junte? ¿Sera que ya no le importa a las cadenas trasnacionales hacer billetes y ahora se preocupan por el pueblo? En los países donde las clases están divididas entre los que tienen los medios de producción y los que tienen sus manos e intelecto para permanecer con vida, la visión de cómo vemos el mundo está condicionada por la clase dominante, es decir, por la clase que tiene los medios de producción (la clase rica). Por eso el discurso es privatizar, privatizar, privatizar. La empresa privada es la ley del sistema burgués, porque es la clase rica y no la clase trabajadora, quien logra atesorar capital e injustamente mantener sus privilegiados modos de vivir. Los/as que emiten discursos simpáticos ante el pueblo diariamente (Jay Fonseca; Lenin López; Cid Marie Fleming; Topy Mamery; entre otros) se convierten en interpretes de la clase rica. Es que el mercado mediático se sustenta de los anuncios de las empresas privadas en el intercambio de la propaganda por dinero. Sabemos que con la privatización de la AEE estas cadenas se abastecerán de riquezas con los anuncios del mercado privado de la energía eléctrica. Como ente mediático de la clase obrera tenemos el deber con nuestra clase, de expresarnos con claridad sobre la privatización y la situación por la que atraviesa la AEE.
De salida dejamos establecido que hay que bajar el costo de la energía eléctrica a nuestro pueblo y que debe ser con medidas energéticas sustentables. Eso en diferentes intervenciones ante el pueblo, los/as trabajadores/as organizados en la UTIER lo han expresado, el abayarde rojo se une a sus palabras y propuestas. Algo importante hay que destacar, el alto costo de la energía eléctrica no es responsabilidad de los trabajadores/as, ellos/as no administran.
Un trabajador/a conserje de la AEE gana 24, mil al año y un celador/a gana 39 mil al año, así lo han expresado trabajadores de la AEE en Mayagüez. Los que han estado dirigiendo la AEE son colocados por los propios políticos burgueses de turno, que a lo largo de la historia han puesto a empresarios y ejecutivos de la empresa privada.

Recordemos a Miguel Cordero, que fue defendido hasta lo último por una cúpula politiquera del país. Tienen empresarios dirigiendo que llevan un plan de privatización de hace muchos años. “La impostergable apuesta por la energía renovable obligara a esa Corporación publica a compartir en la Industria de la Generación de energía con empresas privadas, las que no representaran una gran competencia al principio, pero ganaran terreno”, expresiones de Miguel Cordero en el 2009. En el programa: ¿Por qué pagamos tanto?, ex directores de la AEE eran los que exponían sus ansias de privatizar. Cuando se privatizó la Telefónica, los ex funcionarios directivos eran quienes impulsaban la privatización y terminaron de alguna forma, ganando terreno en el mercado de la industria telefónica. Esta burguesía instalada en la dirección de la AEE es la que está conectada con los magnates ricos de nuestro país como Robin González (dueño de Petro West) y con el capital Multinacional de Puma Energy y Petrobras. Aunque privaticen serán estas empresas las que ponen las pautas en el mercado petrolero, entonces, ¿cuál es la hipocresía de los medios de comunicación y de los/as políticos burgueses? La clase obrera se merece saber quiénes son estas Empresas PRIVADAS que nos están estafando. En 2005 el gobierno bolivariano de Venezuela hizo el acercamiento al país para vendernos petróleo a un precio justo, la burguesía nacional recibió órdenes de Wall Street para impedirlo.
Lógicamente si se nos cuestiona de que si queremos bajar el costo de la luz, todos/as gritaremos a coro que sí. El sistema de producción de mercancías es el capitalismo. Su célula es la mercancía. La energía eléctrica por las leyes de hierro del capitalismo tiene que ser intercambiada en el mercado para nuestro consumo. Si esto es así, comprendemos que el escenario en que el petróleo llega a transformarse en energía eléctrica es un escenario de producción que fluctúa las variabilidades del valor del petróleo, el cual es, ese medio de producción que grandes monopolios imperialistas dominan (Shell, Chevron, Exxobil, Puma, etc.) El mercado de la energía eléctrica tiene una gran necesidad y los capitalistas comprenden esto a su mayor cabalidad. Saben que el medio ambiente esta deteriorado, que el petróleo escasea, que no se puede seguir con esta dependencia. Los mercados y las nuevas técnicas y tecnologías van en desarrollo. Pero el sistema capitalista anda de crisis en crisis y busca sostenerse en los mercados que no ha podido acechar, como nuestra empresa de energía eléctrica. En el 2002 el Kwh estaba a 12 centavos, con el petróleo a $25 dólares el barril. En el 2014 a 26 centavos el KWH con el costo del petróleo en $102 dólares el barril. ¿Si sube el costo del petróleo, como es posible que el Kilovatio por hora no suba? La economía capitalista no es planificada y desgasta sus propios recursos. El petróleo se ha elevado por que su costo de producción ya no es el mismo. Por lo tanto su valor tiende aumentar y los capitalistas tienden a conquistar nuevos mercados, como la energía renovable.
Aunque están movilizándose hacia la producción de energía renovable, nuestra vecina Republica Dominicana sufre las consecuencias de la privatización de su energía eléctrica. Extensos tiempos de lucha se desataron con la trasnacional española Fenosa. La empresa privada apunto su mirada en el mercado de la producción o generación de energía eléctrica. ¡Ahí están los verdes! Fenosa cumplió su contrato y se marcho de la Republica Dominicana porque ya no le era rentable su magnitud de ganancias, pero no sin antes recibir el desembolso de $63.3 millones de euros por el gobierno dominicano. Acordó con el gobierno dominicano la transferencia de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas (CDEEE), actual copropietario de Edenorte, Edeeste y Edesur. Desde entonces se creó como una especie de alianza público-privada que dividía el mercado de la energía eléctrica entre diversas empresas públicas y privadas con diferentes funciones en el mercado energético. Desde 1997 nace la empresa estadounidense AES Corporation, encargada al igual que Fenosa, de la generación de la energía eléctrica. La distribución de la electricidad paso a manos del estado con su Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas (CDEEE). También existe otra empresa generadora de electricidad, llamada Haina. Dentro de la división esta La Empresa de Trasmisión Eléctrica, que opera el sistema de Transmisión Nacional Interconectado. Las diferentes empresas privadas tienen contratos hasta el 2016. El estado dominicano las subsidias con más de 240 mil millones de pesos, mientras las deficiencias energéticas y apagones afectan a la mayoría de la nación y todo su aparato de producción. El costo de la electricidad es elevado cada cierto tiempo. Cobran al estado por la capacidad instalada y no por la energía recibida. A partir del 2008 el estado ha dado 6 mil millones de dólares a estas empresas. ¿Por qué estas empresas privadas no desarrollan un servicio eficiente? Porque solo buscan acrecentar sus riquezas. El Secretario General del Centro Latinoamericano de Administración, Gregorio Montero, destaco en Puerto Rico, que la privatización le salió mas cara al pueblo dominicano; “ahí la misma cantidad de apagones con la empresa privada”. La posibilidad de obtener mayores riquezas para la empresa privada, es el deterioro del servicio, porque mientras más deteriorado este el servicio, mas plantas eléctricas se necesitan importar. Cuando el gobierno no paga a estas empresas se desconectan sin ninguna consideración las plantas energéticas. Excluyendo a Haití, la Republica Dominicana es, de 31 países de América Latina y el Caribe, la que más apagones diarios registra. ¡Nuestros/as hermanos/as dominicanos/as nos envían un claro mensaje!
Este jueves, 15 de mayo 2014 la cámara de representante aprobó la reforma energética en la que se establece una Junta Reguladora que evaluara a la AEE para que baje el costo de la energía eléctrica. La aprobación de la medida da 3 años para que la AEE baje el costo de la electricidad. El senador Larry Seihamer puso el grito en el cielo. Mientras que el senador Bathia, enfatizaba que sigue el proyecto tal y como se estableció desde un principio, con el mismo objetivo de abrir el mercado a la libre competencia. Lo que quiere decir, que los planes de privatización siguen. Reconocemos la pequeña victoria que esto representa para la Alianza, en especial, para los/as trabajadoras/es organizados en la UTIER. Aun así, reafirmamos nuestra posición en contra de la Junta Reguladora, en la medida en que se desembolsara una cantidad de dinero entre las personas que dirigirán esa Junta; en contra de que la Junta de Gobierno siga en manos de empresarios honradores de la empresa privada; y estamos en contra de la estafa de las trasnacionales y nacionales petroleras a nuestro pueblo. Exhortamos a continuar fortaleciendo las estructuras de la UTIER con una amplia conciencia clasista. De otro lado también, necesitamos duplicar los esfuerzos para atraer el apoyo de las masas en la defensa de la AEE; en contra de la privatización de las corporaciones públicas; fomentar la lucha organizada en las comunidades, en las escuelas y universidades, en los talleres de trabajo de las empresas privadas y en todos los sectores en los que se encuentra la clase oprimida. La clase obrera tiene que trascender el amiguismo que puede existir entre la burguesía y los/as obreras/os. Los medios de comunicación son parciales a los intereses de sus propietarios. Personajes como Jay Fonseca no son las voces de nuestra clase trabajadora, somos nosotros mismos organizadamente los que podemos arrancar la fibra de la explotación del ser humano por el ser humano. Los/as obrero/as organizados en la UTIER son una resistencia al sistema, han adquirido beneficios a fuerza de organizarse, estudiar y luchar. La clase obrera debe aspirar a estos logros, entendiendo que el asunto es más complejo que la lucha de beneficios económicos (importantísimos); el asunto es político; el asunto es de la Revolución Proletaria. ¡Arriba la producción de energía Renovable en Manos del Pueblo! ¡No a la Privatización de ninguna Corporación Publica!
¡Que la clase obrera sea la que administre la AEE, expulsemos a esos empresarios de la dirección de nuestra AEE!
¡Revolución o Sometimiento!