Estudiantes logran paralizar la UPR-Bayamón

Por la Redacción del Abayarde Rojo

¡Aló! ¿Fortuño? Te habla Arturo Avilés, tu alcahuete de Bayamón. Sí, sí, aquí todo está chuchin, todo bajo control…

La historia ha demostrado que el camino a la victoria se forja con la acumulación de pequeñas derrotas propinadas al enemigo. Esta lección volvió a repetirse hoy en la UPR Bayamón, cuando decenas de estudiantes lograron paralizar las labores académicas y administrativas, implementando un voto de paro de 48 horas aprobado en la Asamblea del martes, 7 de diciembre de 2010. Con esta acción vuelven a propinarle otra derrota a la administración fascista de turno.

La administración del Rector Arturo Avilés ha sido una de las que ha experimentado con muchas de las iniciativas anti universitarias, que luego han sido adoptadas por otros recintos. No olvidemos el referéndum ilegal para sustituir la Asamblea en la pasada huelga, el derribo de los portones, la implementación de distintas modalidades de APP, y ahora la solicitud de intervención a la policía.

Los estudiantes de la UPR de Fortuño.

Desde tempranas horas de la mañana el recinto amaneció militarizado por más de un centenar de policías, donde estos campeaban por su respeto, afuera como adentro. En los portones estudiantes, empleados de la Hermandad de Empleados Exentos No Docentes (HEEND), profesores y algunos miembros del Sindicato de Trabajadores se manifestaban, pero permitiendo el paso de las personas que desearan entrar. En la entrada Norte, varios carteles decían “Abierto” y “Hay clases”, información contradictoria, ya que, por las condiciones creadas por la administración, se impedía que le proceso educativo se llevara con normalidad.

Los guaynabitos lo resuelven todo gastando dinero en publicidad. Si le llaman Vía Verde, deja de ser un gasoducto, y si dicen que está abierto, el paro terminará y los estudiantes pagarán los $800 muertos de risa.

El profesor Raúl Guadalupe, portavoz de la CONAPU, señaló que muy pocas personas habían roto línea la de piquetes. “Han entrado algunos profesores y personal administrativo, pero los estudiantes que entran, salen al ver que no hay clases”. Otro profesor, que prefirió no identificarse señaló que “intentamos conseguir una reunión con el Rector, a lo que contestó ‘no tengo nada que discutir con ustedes; su responsabilidad es entrar a dar clases’. Nosotros no podemos dar clases en estas condiciones de militarización”.

Aun así, un grupo de docentes fue a la oficina del Rector y le obligaron a que les diera audiencia. Otro profesor señaló “allí no pasó nada. Algunos le preguntaron el por qué del montaje paramilitar, y él (Rector) respondió que era para mantener la universidad abierta y la seguridad de las personas que desearan entrar. Curiosamente, los profesores que querían dar clases fueron los que repudiaron la presencia de la policía señalándole que ‘creó las condiciones para no dar clases’”.

Éste tiene guille de Jacobo Morales.

El Abayarde Rojo pudo comprobar que la universidad estaba desierta, con la excepción de escasos profesores y aún menos estudiantes. Llamó la atención de una excesiva cantidad de policías y guardias privados de Capitol. Interesantemente, no había hampones, ni mercenarios como en el recinto de Río Piedras.

La manifestación no estuvo exenta de conflictos. En varias ocasiones, cuando los estudiantes trataban de posicionarse en la entrada, eran contenidos amenazantemente por la policía, mientras eran filmados y fotografiados por agentes. Un momento de mucha tensión ocurrió cuando la policía cerró la entrada del recinto, a lo que los estudiantes respondieron intentando entrar a manifestarse adentro alegando que “si la universidad está abierta, entonces déjenos entrar”. Luego de esto comenzaron a llegar decenas de agentes en motoras y en guaguas, ocupando todas las áreas del recinto.

¿Dónde es el desfile?

Sin embargo, luego de varios minutos, el Rector envió a negociar con los estudiantes a su siempre fiel alicate, Heber Padilla, asesor legislativo de la tristemente recordada Norma Burgos. Este personero del régimen, actualmente se ocupa de varias “tareas” dentro del recinto, embolsillándose decenas de miles de dólares, que bien pudieran usarse para beneficiar a la universidad. Luego de varios minutos de diálogo, no se llegó a ningún acuerdo, y los estudiantes permanecieron afuera con la determinación de culminar con éxito su paro.

Artículos Relacionados

Leave a reply

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí